Gorka Castillo entrevista en CTXT a Berta Lago Bornstein, que sabe mucho de la renta básica universal, porque lleva muchos años en esta brega por conseguirla. Y habla verdades sobre el Ingreso Mínimo Vital. Como mucha hemos dicho -Yo, Chema Tante, me incluyo , desde el principio, esta medida es una avance, es cierto, pero un avance con titubeos y con muchos -palabra que tanto le gusta a la tecnocracia- incertidumbres. Y yo añado que todo esto pasa por dos cosas. Una, la principal, lo que denuncia Berta Lago, el concepto caritativo franquista que persiste en los asuntos sociales. Y otra, accesoria, pero no baladí, porque el tinglado del IMV lo ha organizado un tecnocráta donde los haya, que ha metido una serie de vericuetos burocráticos, impregnados por el terror de que reciba los raquiticos cuatrocientos y pico euros, alguien que no los merece. Y les repito, a Escrivá, a Sánchez y a Iglesias, que vale más que cien tramposos se mamen las perras, antes que un inocente se quede sin cobrarlas. Y, aemás, que si alguien se toma tanto trabajo por cobrara esa miserable cantidad, es que se la merece, digan lo que digan los papeles.