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sábado, 27 de julio de 2024 02:42h.

Turismo como viaje de placer; de colonización; como  masificación - por Nicolás Guerra Aguiar

 

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Turismo como viaje de placer; de colonización; como  masificación - por Nicolás Guerra Aguiar

ERETAS EN GUADÁ, VALLE GRAN REY Juan-Montesino Barrera
ERETAS EN GUADÁ, VALLE GRAN REY  Juan Montesino Barrera

Conocí el paisaje costero y de extraordinaria belleza interior que es Valle Gran Rey (La Gomera) allá por el año del Señor del mil y novecientos y setenta. Varios coleguillas aprovechamos un puente en la Universidad lagunera, el bajo precio del Santa María de la Candelaria (durante la navegación a veces parecía anclado en alta mar, como negándose a avanzar proa avante) y una baratísima pensión. 

EL SANTA MARÍA DE LA CANDELARIA, NUEVO DE PAQUETE, 1962
EL SANTA MARÍA DE LA CANDELARIA, NUEVO DE PAQUETE, 1962

  Tras varias horas entre bosques y otras por pistas (‘Camino estrecho y sin asfaltar, habilitado para circular vehículos’ según define el Diccionario Básico de Canarismos) el renqueante coche de alquiler nos llevó hasta el final del trayecto. Y allí nos mandó al carajo: expulsó por el bajo vientre aceites, grasas, potingues y pócimas como cuando las perras de vino patero regurgitaban en nuestros estómagos y buscaban atajos, vericuetos o caminillos a la búsqueda de más oxigenados horizontes.

  Valle Gran Rey era un lugar casi deshabitado, ajeno a cualquier señal indicadora de actividad urbana. Solo dominaban en sus costas ensalitrados susurros de la brisa marina e ininterrumpidos escarceos amorosos de las olas sobre el pequeño muelle, pero no con el significado de riña, ruido o alboroto a la manera de Puerto Rico, Cuba... Cincuenta años después se había convertido en el emporio turístico más importante de la isla colombina dominado, sobre todo, por alemanes. Tantos que casi son la mayor parte de los residentes fijos, fijos discontinuos, en prácticas o nuevos y, por tanto, con establecimientos deutsche (restaurantes, cafeterías, heladerías e, incluso, hasta alguno especializado en platos vegetarianos).

VALLE GRAN REY
VALLE GRAN REY, NI AQUELLO, NI ESTO
MERKEL PATEANDO EL GARAJONAY
MERKEL PATEANDO EL GARAJONAY

  La señora Merkel, anterior canciller de la República Federal de Alemania, es asidua visitante de la isla.  Allí no necesita ni el silbo gomero ni las variantes dialectales canarias para comunicarse. Es más: ni tan siquiera el español, pues Valle Gran Rey viene a ser -en pequeñito- un ejemplo de la llamada gentrificación turística (‘Proceso de renovación de una zona urbana, generalmente popular, que implica el desplazamiento de su población original por parte de otra de un mayor poder adquisitivo’) y, en román paladino, "colonialismo de nuevo cuño", así denominado por el señor Déniz, sociólogo especialista e interviniente en la comisión parlamentaria de Reto Demográfico (Canarias).

PACO DÉNIZ
PACO DÉNIZ

  Sí, así es: casi cuatrocientos mil turistas son propietarios de una vivienda en Canarias ("eso no es turismo, es otra cosa", añade). Y según el Instituto Nacional de Estadística, “Canarias tenía registradas 46 784 viviendas de uso turístico a cierre de febrero pasado” (infonortedigital). Lo cual ha conducido, inexorablemente, al disparatado encarecimiento de pisos, casas, apartamentos, buhardillas, azoteas, desvanes, garajes, viejos microbuses habilitados, esquinas con o sin sombra... para amplios sectores de canarios. 

Canarias es la comunidad donde más aumenta el precio de la vivienda, un 22,5% en 2023 FOTOCASA

  Todo ante aparentes silencios, elementales reacciones y marchitas sensibilidades de quienes desde tiempos atrás se proclaman y definen en ágoras, conferencias y medios de comunicación como políticos capaces de hacer suyos los gravísimos problemas planteados a las decenas de miles de isleños desesperaditos vivos por la adquisición de un habitáculo, anhelo casi imposible dada su  precariedad económica. 

PRESIDENTES CANARIAS
PRESIDENTES CANARIAS

  Y eso los obliga a sobrevivir entre penurias y apreturas (cuando no a muy distantes lejanías) pues, desde arriba, les han puesto la vida al rojo vivo. Al poco -es su condición humana, limitada- revientan las entrañas hartas ya de mansas impotencias y supuestas incompetencias políticas, acaso ineptitudes, tal vez incapacidades o quizás dejadeces de miembros del poder, alguno más interesado en destructivos proyectos privados de más camas, miles de camas más. (Por cierto: ¿a dónde han ido a parar los casi ocho mil doscientos millones de euros acumulados en Canarias durante los cuatro primeros meses del año, dato aportado por la periodista Silvia Fernández en Canarias7?)

TURISMO DE MASAS Y TURISMO SELECTIVO, QUE RESPETA EL AMBIENTE Y LA IDENTIDAD
TURISMO DE MASAS Y TURISMO SELECTIVO, QUE RESPETA EL AMBIENTE Y LA IDENTIDAD

  Sí, es la masificación extranjera. Y se pregona como logros políticos, certeras filosofías y sabias actuaciones que en solo cuatro meses a Canarias hayan llegado cinco millones y medio de turistas. Se trata de los mejores datos “de la serie histórica”, tal cantan casi con místicos desvanecimientos algunos que, desde sus mentalidades, abogan por llenar costas e interiores de más chonis, más coches, más bloqueos a caminos ayer entrañables y hoy dominados por poliglotadas masas.  

COCHES DE ALQUILER
C

  Se vuelven ya muy frecuentes imágenes subidas a las redes de comunicación de visitantes que, por su condición de turistas, se creen exentos de limitaciones o prohibiciones. A fin de cuentas pagan para hacer lo que les venga en gana, todo es suyo (zonas de nuestra historia medieval, barrancos o cuevas con grabados aborígenes, dunas, senderos peatonales ocupados por coches todoterreno, baños en los Jameos del Agua, paseos en bici por reservas naturales protegidas, alteraciones de paisajes con pintadas…). 

  Pero no aprendemos, no. A veces parece que la defensa a ultranza de la masificación es lo único importante, lo vitalmente necesario para Canarias. Es el caso, por ejemplo, de un hotel en Fuerteventura: se le concedió el premio Turismo Islas Canarias frente a la orden de derribo dictada por el Ministerio de Transición Ecológica (DiariodeFuerteventura). O de otros en Lanzarote donde (canariasahora) “aún pervive la huella de la corrupción que acompañó al boom turístico... [como] hoteles ilegales en funcionamiento [...]”. 

OLIVA BEACH
OLIVA BEACH UNO DE TANTO HOTELES ILEGALES EN CANARIAS, PREMIADO

  No es fobia, odio o alergia al turista, en absoluto. Así reza el cartel de la foto durante una manifestación de paisanos jartos y ajitos (aspiración de la h en posición inicial e intermedia de palabras, respectivamente). Solo -y sobre todo- es el rechazo a la aparente dejadez por parte de quienes deben buscar el equilibrio, el natural límite. No puede obviarse que el turismo es, con manifiesta diferencia, la principal actividad económica de Canarias (mientras, importamos papas, zanahorias, lo que sea, de Egipto, de Israel, de Marruecos...). Pero el legítimo derecho de sectores empresariales no justifica, ni de coña, la continuada masificación de Canarias y la destrucción, incluso, de sus señas de identidad.   

PADYLLA
PADYLLA

  Más: la casi exclusiva dependencia económica de la actividad turística llevó a fuertes convulsiones a nuestra población durante la pandemia del covid. Miles y miles de personas dependientes del monopolio turístico se vieron afectadas por la brusca interrupción de visitantes: subsistieron gracias al Estado (los ERTE). La muy reciente quiebra del turoperador alemán FTI Group, propietario o explotador de veinte hoteles en nuestra tierra, afectará directamente a mil quinientos trabajadores. (Algunos afirman que la catástrofe es la pérdida de ochocientos millones de euros, como la facturación del año anterior. ¡Ditoseadiós!) 

FTI

EL LOGO DE FTI ES MUY CLARO: TRASPONEN, VOLANDO Y "AHÍ OS QUEDAIS", DICEN, PORQUE APRENDIERON ESPAÑOL EN LA PENÍNSULA

 Volvemos, pues, a tropezar por enésima vez en el mismo tenique, quizás torpeza o  desidia obligan. Nada se ha aprendido de la experiencia anterior, muy inmediata en el tiempo. ¿Para qué, pues, ayuntamientos, mancomunidades de municipios, cabildos, Gobierno autonómico? Turismo sí, claro. Pero con inviolables límites en el número de entradas. Y de paso muchísima más atención al campo, es preciso mimar a agricultores y ganaderos. ¿Qué sería de nuestra tierra si por lazos del demonio (o de los humanos) el turismo internacional desapareciera durante años?

  (Muy acertada, por cierto, la Coordinadora de Lengua Castellana y Literatura de las universidades canarias por plantear a los examinandos de EBAU el tema turístico en Canarias. Su propuesta para opinar, impecable: “En los últimos meses muchos colectivos sociales y científicos han abogado por un cambio de modelo turístico en las islas pues la masificación puede degradar irremediablemente nuestro territorio: ¿crees que es posible un cambio en el modelo turístico de Canarias?”, leo en La Provincia. A fin de cuentas es una  generación que en pocos años también se verá afectada directamente.) 

 

* Gracias a NICOLÁS GUERRA AGUIAR
* Gracias a NICOLÁS GUERRA AGUIAR.
Editado por Chema Tante, responsable de los comentarios a pie de imagen

 

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