Sobre el Referéndum de Catalunya del 1 de octubre - polr Josep Toló Pallás
Ningún “Ciudadano” responsable puede desentenderse de un asunto del que depende nuestro futuro y el de nuestros descendientes.
Ningún “Ciudadano” responsable puede desentenderse de un asunto del que depende nuestro futuro y el de nuestros descendientes.
“El proceso soberanista catalán no solo beneficia a Cataluña, sino que históricamente se convierte en la mejor oportunidad para democratizar el Estado español”
La negativa del Gobierno de Rajoy a dialogar y negociar la posibilidad de que el pueblo catalán pueda expresarse en Referéndum sobre el futuro de Catalunya, ha tenido como repuesta de la Generalitat la convocatoria de un referéndum unilateral, decisión que, lejos de encauzar los legítimos derechos del pueblo catalán, sólo contribuye a potenciar aun más un nacionalismo español de nefasto recuerdo en nuestra historia. Esta situación nos lleva hacia un callejón sin salida cuyas consecuencias sufrirán una vez más, con toda seguridad, la clase trabajadora y las capas populares de Catalunya y del resto del Estado.
Desde La Izquierda consideramos que dada la falta de legitimidad democrática del resultado del referéndum en Turquía según indican todos los observadores internacionales, no se lleve a cabo la reforma constitucional y se abra un período de diálogo con la oposición.
¿Dónde está la dignidad? ¿Quién nos representa, de verdad?
La digna, gallarda, imagen de un diputado del pueblo, Cañamero, o de un senador, Bernal, ostentando la realidad mayoritaria en los pueblos que gemimos bajo este estado español: "Yo no voté ningún rey" "yo, república" en el Congreso, ha sido criticada por quienes se las echan de ostentar la representación popular. Pero demuestran que esa representación es espuria, porque ha sido consguida con las malas mañas de la comunicación engañosa y mercenaria, pagada con el dinero mal habido. Cañamero tiene razón en lo que dice. Y lo viene a certificar, desde el más allá, nada menos que Suárez, "el tahur del Mississipi", como le llamara otro que tal. Suarez, como buen trilero de la derecha, el hombre ensalzado por embustera historia escrita por el victorioso poder del dinero, que le birlara a la gente su voluntad. Lo desveló, en una revelación histórica que debería hacer sonrojar a esa turba monárquica que saca pecho sin tener por qué, LA SEXTA COLUMNA. Adolfo Suárez se lo confesó a Victoria Prego. Y los pueblos de este estado de derecha, obligados a un vasallaje contra su voluntad, deben ser resarcidos del despojo.
Han transcurridos 41 años desde el abandono por parte de España del Sáhara Occidental, siendo un Territorio pendiente de descolonización, sometido además a una ocupación por parte de Marruecos. Desde Convergencia de La Izquierda reconocemos el enorme valor del Pueblo Saharaui y sus legítimos representantes tras 41 años de lucha y digna resistencia, y por eso hemos salido en apoyo a su lucha en la manifestación de hoy en Madrid.
El próximo sábado 12 de noviembre se celebra una Manifestación en Madrid en apoyo al Pueblo Saharaui y pidiendo el referéndum de forma definitiva en la región.
Bajo la mirada impasible de las Naciones Unidas, teórica garante de los acuerdos de alto el fuego entre Marruecos y la RASD, firmados en septiembre de 1991, y del respeto y seguridad a los territorios liberados del pueblo saharaui, en días pasados, el ejército marroquí ha violado los mismos, invadiendo la región de Al Gard-Garat en el sur del Sahara Occidental ocasionando la muerte de dos civiles saharauis, poniendo, además en alerta a Mauritania, país vecino, que se ve, igualmente amenazado por las aventuras belicistas de la monarquía alauita. Dicha región se encuentra bajo control de las fuerzas de la Minurso, misión de Naciones Unidas para el referéndum en el Sáhara Occidental
Intersindical Canaria demanda del gobierno de Canarias, la paralización de los trámites para la aprobación de Ley del Suelo y que dicho proyecto sea sometido a consulta popular mediante un referéndum vinculante entre la población canaria. No es de recibo el talante autoritario del Gobierno (CC y PSOE) en la tramitación de esta importante norma para el futuro de Canarias.