El conflicto entre Argelia y Marruecos puede estallar en un choque armado. Eugenio García Gascón en PÚBLICO
Eugenio García Gascón en PÚBLICO explica la delicada situación entre Marruecos y Argelia, con el FPolisario como tercero en discordia
Eugenio García Gascón en PÚBLICO explica la delicada situación entre Marruecos y Argelia, con el FPolisario como tercero en discordia
Eugenio García Gascón comenta en PÚBLICO los entendimientos entre las oligarquías árabes y el estado de Israel. Lo señala Luis Portillo Pasqual del Riquelme y yo, Chema Tante, remarco lo que dice el artículista. De esta coyunda contra todo derecho, quien sale perjudicado, una vez más, es el hostigado pueblo palestino. Y hay que recordar que los únicos movimientos árabes democráticos, respetuosos con los derechos humanos y los de la mujer, que son el palestino y el saharaui, son despojados de su soberanía y abandonados a su suerte, pr las llamadas democracias del mundo.
Se sabe hace mucho tiempo que la acción de Israel en el plano internacional es absolutamente vergonzosa. Todo el mundo conoce que el MOSSAD actúa por todas partes con la mayor arrogancia, saltándose leyes, convenios y derechos. Y hay que recordar una vez más que se trata, no del pueblo judío, sino del gobierno del estado de Israel. Un gobierno integrista, ultraconfesional que utiliza el chantaje de la opresión milenaria que ha sufrido ese pueblo judío para adoptar las mismas prácticas injustas. Eugenio García Gascón es un periodista experto en el conflicto entre Israel y Palestina. En PÚBLICO y KAOS EN LA RED ofrece esta información, que señala Luis Portillo Pascual del Riquelme sobre esta otra manera del gobierno de Israel de faltarle al respeto a la Comunidad Internacional. El espionaje de Israel despliega sus tentáculos con la pasividad, cuando no la complicidad patente, de los gobiernos democráticos. Y, encima, han convertido a esta actividad indecente en un negocio muy rentable,.
El coherente veterano militante socialista Antonio Aguado señala en PÚBLICO este texto magnífico de Ana Bernal-Triviño recordando y ensalzando la memoria de una combatiente anarquista y antifascista, que vivió con coraje sus ideas y murió en el exilio, abandonada y despreciada hasta por su familia