El desastre del Ingreso Mínimo Vital y la estupidez: Cipolla tenía razón, Jordi Arcarons / Paco Ramos / Daniel Raventós / Sergi Raventós / Lluís Torrens, SIN PERMISO, CUARTO PODER, CTXT Comenta Chema Tante
Jordi Arcarons / Paco Ramos / Daniel Raventós / Sergi Raventós / Lluís Torrens, describen en SIN PERMISO, CUARTO PODER, CTXT el auténtico desastre del IMV, el flamante estandarte con el que el PSOE y UNIDAS pODEMOS dicen que "dejan a nadie atrás. Y yo, Chema Tante, comento, porque no se puede uno quedar en silencio.
Comenta Chema Tante:
Hay que coincidir con la apreciación de Arcarons, Ramos, Torrens y los dos Raventós. estamos en manos de una horda estúpida, según la conocida definición de Carlo Cipolla. Se haceb daño a sí mismos y a los demás. Aunque la arrogancia de personajes como Escriva, Sanchez, Calviño, Calvo y Montero les impida percatarse de ello, cuando un gobierno maltrata a la gente desamparada, a la larga se está maltratando a sí mismo. Sin embargo sería preciso un análisis más profundo, porque las motivaciones y circunstancias de los actores no son las mismas.
Tenemos a Escrivá. Que realmente era consciente de que el sistema del IMV no iba a funcionar. Nadie puede creerse que un profesional de la categoría y la experiencia de Escrivá no supiera que estaba engendrando un monstruo inoperante. Y lo mismo habrá que decir de Sánchez, y no se diga de Calviño, Calvo y Montero, las tres fieras neoliberales incrustadas en el Muy Leal Gobierno de Su Majestad Felipe, para que nadie se desmande.
Es eso, No se podía esperar demasiado de una gente que cabalga sobre el caballo psoeísta,, pisoteando los ideales más genuinosD el socialismo.
Pero la gente de Podemos ¿qué hace la gente de Podemos? y la gente de Izquierda Unidad, del Partido comunista ¿qué hacen todavía en el gobierno, aparte del ridículo?
No se ha notado la presencia de Unidas Podemos en e Gobierno del Estado. La miseria del Salario Mínimo y los ERTE, los habría aprobado igualmente un gobierno de derecha. La derogación de la Reforma Laboral, la actualización de las pensiones, las ayudas a la dependencia, se han perdido en las nubes de las utopías. Y este escándalo del IMV termina de sellar una vergonzosa gestión. La única alternativa honrosa de Unidas Podemos es salir de un gobierno en el que no se le deja hacer nada.
Y, para no olvidarnos de Canarias, la misma historia. Al año largo de gestión, lo único que puede presentar Sí Podemos Canarias, presente en el Gobierno Florido, es haber repartido los 16 millones que les dieron Ángel Víctor, Román y Casimiro, para que Noemí se sintiera la campeona de la gente indigente y se quedara quietecita. Pero nada más, esos trescientos eurillos que derramó sobre las y los pobres. Y ni siquiera ha sido capaz, no ya de continuar con el Ingreso Canario de Emergencia, sino de repartir completos los 16 millones, de los que queda un remanente.
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En cualquier caso, el IMV despertó esperanzas entre mucha gente necesitada. Muy normal. También dispuso de muchos defensores provenientes del mundo de los “expertos” (este conjunto tan poco claro como el de los tertulianos). Y además algunos de los “expertos” se convirtieron en poco más que palmeros entusiastas sin el menor atisbo de vergüenza. Eso no es o no debería ser tan normal. Como la derecha extrema y la extrema derecha atacaban con la cantinela de la “paguita”, los defensores del IMV tenían un buen pretexto para redirigir las atenciones y desviar las críticas que no provenían de la derecha con la consabida música de que “hacen el juego a la derecha”. La cosa sonaba ya entonces muy débil, muy débil. Extremadamente autojustificativa. Parecía que se veían venir el chaparrón, el fracaso, el horror. La táctica utilizada con los críticos: la más agresiva. Los críticos del IMV que defendíamos la RB éramos calificados con no mucha amabilidad de pretender “saltos revolucionarios” (sic) hacia la RB; de no entender que el “gradualismo” es la quintaesencia del funcionamiento del mundo (aunque en realidad es su pobre concepción del funcionamiento del mundo lo que ellos mismos defendían, pero no se trata ahora de ponernos quisquillosos); de ser terribles esencialistas que no ven más que la RB y cualquier cosa que se aparte de ella es vista como malvada; que calificar de subsidio para pobres al IMV era pura aporofobia (aunque el propio ministro Escrivá hubiera dicho que era un subsidio para extremadamente pobres qué más da)… Como argucias retóricas podían tener su efectividad. Para mantener a los fieles firmes por un tiempo, quizás también. Que esta argumentación se atuviera a la verdad, a la voluntad sincera de discutir razones, era lo de menos.
Todo el extenso y atinado informe de Jordi Arcarons / Paco Ramos / Daniel Raventós / Sergi Raventós / Lluís Torrens en
