El imperio inmobiliario del Vaticano, con el dinero de Mussolini
PÚBLICO y EL PERIÓDICO comentan una información aparecida en THE GUARDIAN. Otro testimonio de la tremenda fortuna de los sepulcros blanqueados que integran la Curia Romana. De nuevo, la constatación de la hipocresía de estos tipos de la mitra y el báculo. Y les diré otra vez a los hombres y a las mujeres que viven con sinceridad su fé católica, que merecen todo mi respeto, pero que no hay derecho a que permitan en su asociación confesional tamañas vilezas. El origen de ese dinero es lo de lo menos. Lo grave es el destino que le han dado.
Cuántos dramas se resolverías con esta riqueza, cuántos programas de Cáritas podrían financiarse con el dinero que atesoran los buitres del Vaticano
26 de enero de 2013 (08:37 h.)
Yo no puedo menos que recordar a los católicos y las católicas las enseñanzas de su doctrina en cuanto a la pobreza y a la condena a los ricos. Ya saben, lo del ojo de la ahuja y el camello o lo de los mercaderes del templo o la bienaventuranzas y los lirios del campo, las avecillas del cielo, San Francisco de Asís etcéterra, etcétera. Para que vean que quien condena a la Curia no soy yo, sino el propio Cristo.