El rey Juan Carlos I fraguó su fortuna con la venta de armas a países árabes junto a amigos como Colón de Carvajal y Khashoggi, Carlos Enrique Bayo en PÚBLICO
Estos informes que firma Carlos Enrique Bayo en PÚBLICO y que recomiendan Luis Portillo Pasqual del Riquelme y el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado, corrobora la absoluta carencia de escrúpulos del rey bribón. Juan Carlos no amasó su fortuna, como se ha dicho, con las comisiones por el petróleo, que dentro del cinismo, sería algo justificable, sino con el tráfico del dolor y la violencia, el comercio de las armas.