"Debía de andar por los doce añitos de mi vida cuando por razones familiares dormía y casi vivía en La Vega de Gáldar, distanciada del casco a miles de millas y con el barranco por medio, a veces puñetero cuando bajaba cargado de esperanzas para las gentes de plataneras, cafetales y verduras, ansiosas de racimos de lluvias que correntiaban desde las Medianías."
"Que el señor director general de Relaciones Exteriores del Gobierno de Canarias fundiera 820 euros nuestros en dos noches de hotel en Madrid no tiene nada que ver con la concesión del premio Hispania Nostra al Parque Arqueológico - Cueva Pintada de Gáldar. Que aquel señor Martínez-Fresno sea dado a hoteles de lujo cuando lo viajan a Madrid, Barcelona (no hay problema con los euros, se reduce un aula y al carajo) es eso, veleidad, antojo, capricho, debilidad humana, el hombre es joven, sonriente, elegante."