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Dice Federico Aguilera Klink, al señalar este artículo de Andrew Spannaus en CONSORTIUM NEWS: Es clave para que la gente empiece a entender que el gobierno puede crear dinero sin que aumente el déficit público y sin que los bancos ganen...En la línea de lo que decía hace poco Juan Torres "Dinero hay, lo que falta es voluntad para salvar a las personas", Spannaus denuncia la ausencia de sensibilidad de los gobiernos, para arbitrar mecanismos que permitan obtener los recursos financieros necesarios para salvar a la gente y evitar que la economía se hunda, como consecuencia de la crisis sanitaria. Spannaus escribe para USA, en la Unión Europea no es cuestión de la FED ni, por supuesto, de los Bancos Centrales de los estados que ya han perdido su capacidad de emitir dinero, pero sí lo puede hacer el Banco Central Europeo. Como dice Spannaus, digan lo que digan los puristas tecnócratas, actualmente ya se está creando dinero de la nada. Se hace en las Bolsas, con la especulación financiera, que permite posible que las acciones de una empresa tengan un valor superior al que realmente tienen los activos de esa empresa. Lo hacen los bancos, que conceden créditos por un dinero que la persona o empresa que lo recibe se gasta como quiera, pero que el banco no tenía en la práctica. Y lo hace el propio Banco Central Europeo, cuando a la tecnocracia neoliberal le da la gana. Dinero que surge de la nada, sin representar valor real alguno, pero que sí puede adquirirlo, si se destina a un fin productivo.Y, también lo dice Spannaus y yo, Chema Tante, lo grito tan fuerte como pueda, la emisión de dinero no genera inflación, si el dinero creado se destina a esos fines productivos. Lo que distorsiona el valor de la moneda es la especulación y la inversión innecesaria. De manera que ojalá -aunque lo dudo- se impusiera la sensatez y esta Unión Europea dejara de ser de los mercaderes para ser de las personas y se dejaran de deudas y bonos y sacaran el dinero de dónde está. Y si hace falta más, que se ponga en marcha la maquinita. Ahí está el caso, en estos días, del Reino Unido que, como se ha sacudido con el Brexit el dogal de la UE, financiará con emisión de dinero nuevo, sin endeudamiento, el gasto adicional que exijan la lucha y las consecuencias de la pandemia