Rafa Dorta se cachondea desde LA OPINIÓN de la conferencia dada por el de REPSOL

En LA OPINIÓN, Rafa Dorta le da cumplida respuesta a la gente de los partidos en el poder -Rafa cita en concreto al Pp, pero yo se lo he escuchado también a Paulino. con esa rebencada de la "mayoría silenciosa". Cada vez que alguien proclama su protesta, el protestado apela a la gente que no estuvo en la manifestación.

Rafa Dorta propone en LA OPINIÓN un juego de conceptos en este artículo que, como él mismo me comenta "exige una doble lectura"

En LA OPINIÓN, Rafa Dorta aplica su habilidad en la metáfora para exponer su criterio ante el oportunismo que utiliza las ideas independentistas con fines particulares

En LA OPINIÓN, Rafa Dorta le dedica unas reflexiones al Presidente de la Cámara de Comercio de Tenerife

Rafa Dorta publica en LA OPINIÓN este artículo en el que demuestra su tino para la metáfora. Rafa describe la similitud entre los valores del deporte olímpico y los que tiene que desarrollar Nuria, enferma de cáncer, sometida al "desprecio olimpico de la inseguridad social" que supone la lista de espera.

Aqui, en nuestro sur, el turismo barato llena los hoteles de ingleses con exceso de grasa que sudan litros de cerveza mientras lucen con orgullo la pulsera amarilla del todo incluido.

Las patéticas confesiones de un presidente sin credibilidad, confirman que la política es un vodevil protagonizado por los malabaristas del cinismo; magos capaces de sacar cualquier cosa de una chistera imaginaria; y todo por seguir ahí, representando un falso liderazgo...

Las imágenes reales del descarrilamiento circulan a toda velocidad, como sangre que corre por las arterias de la red, y llegan hasta el último dispositivo táctil, hasta la última terminal unida a unos dedos nerviosos que se afanan en descubrir los detalles...

El movimiento indignado esta ocupando el espacio ideológico que representaban las izquierdas. La masiva protesta en Brasil es análoga al 15-M, a la primavera árabe o a las manifestaciones en Turquía; y aunque su amplio abanico de reivindicaciones no coincida en el tiempo con las que se escucharon en Israel, Grecia o Portugal, en todas existe un claro mensaje de fondo. Y es el creciente rechazo global hacia el modo en el que un poder económico, también percibido como global, establece las reglas del juego en el actual proceso de mundialización.