Guillem MartÍnez, desde CTXT REVISTA CONTEXTO y Juan Carlos Escudier, desde PÚBLICO, tratan de las complicaciones que le esperan al Gobierno PSOE UP. Porque, a las dificultades inevitables que genera la complicada situación económica mundial, generada por el neoliberalismo y la injusticia social y fiscal dejada por año de gobiernos de derecha en el estado español, se une la cerrilidad de esa misma derecha -aunque fraccionada ahora, es la misma-  que confunde la controversia de ideas y el debate político con la agresión y el matonismo. Ambos artículos los selecciona el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado

Yo, Chema Tante, siempre he mantenido que es injusto llamar "Tamayazo" a la fechoría que impidió al vencedor Simancas ser presidente de la Comunidad de Madrid en 2003. Porque Teresa Sáez es tan culpable y protagonista como Eduardo Tamayo de la felonía que entronizó a la harpía Aguirre, con las malignas consecuencias que hemos conocido. Pero el término tamayazo se ha impuesto, para definir la traición alevosa. Y así aluden a lo que puede pasar este martes 7 de enero en el Congreso la multitud de  referencias que aparecen en los medios. De esa multitud, el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado selecciona este artículo de Juan Carlos Escudier y este editorial, ambos de PÚBLICO

Se chotea con elegancia, Juan Carlos Escudier, en este artículo subrayado en PÚBLICO por Antonio Cabrera de León, que publica un sabroso comentario y por el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado, de la subrepticia manera en que se ha anunciado la tantas veces anunciado, muy esperada pero que no llegaba noticia del nuevo obierno progresista en el estado español. Sí, el de los comunistas chavistas sediciosos golpitas separatistas que tiene de los nervios a la derecha cerril, de la Díez a la Arrimadas, pasando por la Monasterio. Cito solamente damas, porque soy feminista. Y es que todavía resonaban los ecos de los villancicos y las banalidades de Felipe el último y estaba la gente contando las uvas, cuando, sin que se rompieran los cielos ni se desataran los ratos, se ha sabido la noticia de que en este imperio español, los reyes, los buenos, los multirraciales, va a traer el primer gobierno de verdad progresista, de izquierdas, desde que Casado, el otro malo, no el de ahora, rompeira las últimas esperanas de resistencia democrática. Y yo, Chema Tante. que siempre he creido que más  vale regular en la man que mejor volando, digo que bastante que me alegro y que hay que apoyar a los rojos, aunque sea para chinchar a los azules. Lo que no acabo de entender es qué pinta Rosalía en el fregado, pero como la chica catalana me cae muy bien, pues también me priva un montón.

En artículo que señala en PÚBLICO el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado, Juan Carlos Escudier se cachondea, de muy elegante manera de las repetidas cachetadas que le propinan, desde todas las instancias judiciales europeas, a la Justicia del estado español. Es que es algo ridículo. Esto lo digo yo, Chema Tante: a la demostrada incompetencia técnica, quienes administran justicia en este imperio español unen la estulticia que genera la obcecación, el rencor y el fanatismo. No. Europa no es independentista; eso es una broma inteligente de Escudier. Lo que es Europa es rigurosa con las leyes y los procedimientos y, sobre todo, con el sentido de la lógica.

El coherente veterano militante socialista Antonio Aguado señala en PÚBLICO este ocurrente pero didáctico artículo de Juan Carlos Escudier. El texto demuestra que no todas las comparaciones son odiosas, sino que algunas pueden ser esclarecedoras. Al lado del candidato laborista británico, Corbyn, la figura del podemita Iglesias no resulta tan radical como se pretende hacer creer. Y al lado de las fuerzas económicas británicas, la oligarquía empresarial en el estado español demuestra ser de una intransigencia y un egoísmo apestosos.

Muy cierto, aunque se queda corto, lo que alega Juan Carlos Escudier en PÚBLICO, en articulo que subraya el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado. Cierto, porque la reivindicación a la figura de Companys debe extenderse a sus colegas ministros Zugazagoitia y Peiró, también asesinados a sangre fría por la bestia franquista. Corto, porque hay multitud de causas de asesinatos, torturas, prisión y exilio que sufrieron esa legión de gente defensora de la libertad que significó la II República. Y yo, desde Canarias, no puedo dejar de olvidar a Guillermo Ascanio, como ejemplo de esos tantísimos otros casos.

Yo Chema Tante, confieso que me alboroza estruendosamente que alguien se meta con esa pareja de oportunistas incompetentes, falaces, que ha hecho del fanatismo y la intransigencia la clave de su programa político. Me refiero al Malinche Rivera y a La Lozana Andaluza Arrimadas. Una pareja que ha parido filosóficamente a una repelente camada de especímenes a su imagen y semejanza, entre quienes destaca ese camaleón que se llama Joan Mesquida. Estas historias nos las cuentan en sendos sabrosos artículos Juan Carlos Escudier y David Bollero que señala en PÚBLICO el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado.

Desde ¡luego, priva mucho comprobar que no todo el mundo se traga la consigna oficial de que en este estado todo el mundo es igual ante la justicia y que el que la hace la paga. Como dice Juan Carlos Escudier en este artículo que señala en PÚBLICO el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado, el insecto Urdangarín no es sino el pobre infeliz que ha pagado el pato, para salvar el pescuezo otra vez a una familia que lleva siglos arramblando con el dinero público y privado que se le pone a tiro.

El coherente veterano militante socialista Antonio Aguado señala en PÚBLICO este jocundo, sarcástico artículo con el que Juan Carlos Escudier anticipa grandiosos momentos, cuando, este mismo martes 5 de junio, Aznar se manifieste ante la grey Ppera, asunto de los últimos acontecimientos.

El coherente veterano militante socialista Antonio Aguado recomienda este artículo en PÚBLICO en el Juan Carlos Escudier cavila sobre la razones de que M. Rajoy no hicciera lo que hubiera permitido a su partido seguir gobernando. Aunque Sánchez le ofreció retirar la Moción si dimitía, el Rajoy de la M. prefirió mantener su proyecto personal. Que ahora es volver al gobierno, para poder seguir arramblando, con la impunidad que le otorg de la benevolencia de la Justicia.