Alienados - por Rafael Juan Rodríguez Marrero * .

    Los medios de comunicación, en España y en Canarias, vienen obsequiándonos desde el pasado día 20 con una noticia que a mí, personalmente, me provoca hastío. Una noticia sobre la que casi todo el mundo (en aquellos territorios) se ha pronunciado. El presidente de la Federación de Fútbol española ha mostrado a quien lo haya querido ver su natural e imperdonable machismo.  

    En 2016, la ministra de Educación Secundaria y para Adultos sueca, Aida Hadzialic, dimitió tras haber dado positivo en un control de alcoholemia. Por semejante motivo, el pasado mes de julio dimitió Kiri Allan, la ministra de Justicia de Nueva Zelanda. Dos simples ejemplos que extraigo de la memoria para mostrar que, ante una actitud incivilizada (y lo es tanto la del borracho conduciendo como la del machista “embistiendo”) la persona que la realiza y tiene “responsabilidad” pública debe disculparse y dimitir. Se acaba el cuento. 

Y perdonen por equiparar alcoholismo con machismo; el primero es un vicio (o una enfermedad, en términos sanitarios). Lo segundo es una lacra que asola a muchas culturas arraigadas en un injusto y milenario patriarcado.

Sin embargo, lo que me provoca hastío son los modos en que tanta gente (ministros, empresarios, periodistas,…) e instituciones “han entrado al trapo” con las imágenes y los discursos que nos brindan sobre ese asunto, desde hace más de una semana, los mass-media y las redes sociales. 

De repente, leemos que una institución como la FIFA (Federación Internacional de Fútbol Asociación) acuerda “suspender provisionalmente al señor Luis Rubiales de todas las actividades relacionadas con el fútbol a nivel nacional e internacional” por sus actos. Una institución que a finales del pasado año organizó (tras haber dado su visto bueno en 2010) el último mundial de fútbol masculino en Qatar; un país que entre otras cosas no se caracteriza, precisamente, por el trato igualitario entre personas de distinto género.

O comentarios de personajes como Javier Tebas, presidente de La Liga y vinculado a la extrema derecha política española, declarando que Luis Rubiales ha hecho “un daño reputacional para todo el fútbol español que ya es inevitable”. De repente nos enteramos que a los fascistas les importa la igualdad entre géneros.

Simplemente dos ejemplos, seleccionados entre muchos, de instituciones y personajes que llevan el machismo y el patriarcado “en vena” y a quienes los medios de comunicación visten de violeta.

Mientras tanto, el calentamiento global, la acelerada pérdida de biodiversidad, las guerras asesinas, modelos productivos y de desarrollo insostenibles, la crisis hídrica en diversos territorios, la carestía de la vida, el enriquecimiento ilícito de los grandes (banca, trasnacionales) las deudas (públicas y privadas), los salarios que no garantizan llegar a final de mes, las pensiones raquíticas de muchísimas personas, los servicios públicos (sanidad, educación, servicios sociales,…) mercantilizados y crecientemente privatizados, los micromachismos…; todos estos y otros asuntos quedan empaquetados y convenientemente guardados para otras ocasiones, si acaso; quizá, para después del verano. Dependerá de la agenda.

Me provoca hastío saber que, en otoño, seguiremos -medios de desinformación mediante- debidamente alienados.

                    Rafael J. Rodríguez Marrero. 

En Fuerteventura; 26 de agosto, 2023

* Gracias a Rafael Juan Rodríguez Marrero