Mauricio, el velillo embustero que desborrifó a la izquierda y al nacionalismo en Canarias

A Mauricio le piden cárcel, por mentir en documento público. Éramos legión quienes en Canarias denunciábamos que José Carlos Mauricio es un falso redomado, un tipejo impresentable que jugó con los sentimientos de izquierda y nacionalismo para aprovechar la política y sus cargos públicos en su propio beneficio y el de sus amigos empresamangantes. Un vulgar charlatán, capaz de conducir sin permiso muchos años y de falsear documentos. Esto que el están demostrando, de que Mauricio mintió para contratar a la pareja de un amigo suyo en una entidad de derecho publico que él preside, es eso, algo que se le está demostrando. Pero hay una toga de casos que no se investigaron, por la alta posición pública del bardago. Juan García Luján recuerda, desde su muro en FACEBOOK otra anécdota vergonzosa (de 2003) de uno de los más abyectos personajes que se hayan dado en estas islas dominada por gente miserable. Cuando Mauricio recomendaba favorecer con inversiones al gobierno sanguinario de Marruecos.

El amor entre estois dos hermanos jeringó  a los pueblos

"Juan Carlos pactó en secreto los términos de la Marcha Verde con Hassan II" La infomación sobre otro vergonzoso dato de la hiistoria de la monarquía franquista española, la dan Gonzalo Araluce y Jorge Sainz en EL ESPAÑOL. Y la comenta atinadamente Juan García Luján

Querido Zygmunt Bauman hace una hora dejé sobre la mesa tu último libro "Extraños llamando a la puerta"; un regalo que me hizo mi amigo Antonio Guedes. 

Me gusta, pero me inunda de magua, esta historia que cuenta Juan García Luján en LA PROVINCIA, sobre el rescate que hizo Tito Cava de TABURIENTE para nuestro folclore canariio. Porque Luis, Miguel y Manolo empezaron haciendo versiones de música sajona y gracias a la sugerencia de Tito -quizá hubiera pasado igual, pronto o tarde- hoy tenemos las maravillas que canta y toca esta gente. Pero me llena de magua, porque esto, en el fondo, no es más que un leve alivio, con algunos otros más, en la invasión cultural que sufrimos. No hay más que contemplar y escuchar la multitud de actos -tanto públicos como privados- que reciben denominaciones inglesas; los audios que le meten a anuncios "de la vida de nuestras islas" con música sajona o, en fin, la ola vosótrica, que no se frena. Nuestra cultura se hunde, a pesar de los esfuerzos de gente como TABURIENTE o la brega que iniciara Nanino y su tropa, con  TENDERETE. Sí, este país sigue esperando, tiene razón Juan al conjugar en presente.

Candita Luján

Desde su SOMOS NADIE, Juan García Luján homenajea a su tía Candita en su muerte. Aparte del interés de conocer detalles de una vida fecunda, vale la pena leer la fresca prosa de Juan. Con mi abrazo a la familia

Juan García Luján, en este portentoso por la rapidez artículo en su SOMOS NADIE, coincide, en el titular, con la preguntita que le hace al entrometido Hernández Bento un tuitero, sobre la aúrea bandera de la Isla de Tortuga, digo, de Panamá. Juan García Luján pasa, partiendo de la figura gloriosa de Luis Alsó, ràpida revsita a la historia de nuestra querida bandera. Que no me cansaré de repetirlo, es la tricolor con azul flojito y siete estrellas verdes, no la malichenta del los perros encollerados ni mucho menos, la pánfila horizontal con azul oscuro que guindan por esos pueblos en las fiestas. Yo, Chema tante, lo repito: Me gusta la bandera, tricolor con siete estrellas verdes. Y, en el corazón, con las ansiadas siglas CL que le pusieran los hermanos Cantero y su madre, Carmen Sarmiento. Y aprovecho para añadir también que el color verde de las siete estrellas representa nuestra incontestable africanidad. Que se sepa. Como también debe saberse que la comparanza entre Hernández Bento y otras personajes canrios, es tremenda. Para el ppero, claro.

Feliz colateral noticia. Juan García Luján va dejando la molicie y vuelve a prodigarnos su inspirada prosa en su estupendo (cuando lo atiende) SOMOS NADIE. Esta vez, Juan aborda un tema muy dilecto para quienes seguimos la política, de acá, de all´y de acullá, el de las miserias que adoban la historia de un de los sujetos más deleznables que ha procurado esta política: Soria. El zeñorito. Soria para las amistades, que ha sido postulado por su compinche Rajoy para el Banco Mundial. Sin dejar tampoco de mentar el sonoro partigazo de Rajoy y el Pp en las elecciones a presidente de gobierno, el texto recuerda la actividad tuitera de Marhuenda y la muy significativa de otro velillo de la coalición empresaria, José Manuel Pitti. Rajoy y Soria siempre tienen quienes les defiendan, porque la pasta tiene las uñas doradas.

Aunque un pizco abandonado, Juan García Luján mantiene su sitio NO SOMOS NADIE, al que vuelve de cuando en vez para cantarle las verdades a alguien que se lo merezca. Como hace en este clarito post, pidiéndole a Barragán, capitoste general de la venal Coalición poco canaria, que le dé la parte que corresponde de las perras que esperan sacar de su ganchocheo del voto de Oramas al partido poco popular. Y yo me apunto a la idea, para gritar también con todas mis fuerzas que cuando el partido de Barragán, Oramas y el genuflexo Clavijo dice que negocia los intereses de Canarias, en realidad está arrimando la candela al cochino de sus bastardos beneficios, los de los granujas a quienes pertenece ese partido que no es partido, sino empresa comercial. Y de la que Barragán no es más que el mayordomo servil.

Desde su SOMOS NADIE, Juan García Luján se emociona recordando a un comunista al que se llevó el fuego en La Palma. Francisco José Santana Álvarez, comunista, ecologista, agente forestal, ha dado su vida defendiendo la naturaleza agredida por la estupidez de un inconsciente.

La legión de personas perjudicadas directamente -indirectamente, todas las canarias- en las islas por el maléfico Soria es interminable. Y en ella figura Juan García Luján, que ha soportado con elegancia y discreción su cruz. Pero ahora se une al regocijo por la salida -Juan dice que definitiva, yo digo que esta tortuga se da la vuelta rápidamente- de la actividad pública de un tipo que encarna todo lo protervo que tiene la utilización de la política en el particular provecho. Juan García Luján publica en su SOMOS NADIE -algo hay que agradecerle a Soria, que haga que Juan mueva su página- esta estupenda misiva al ya ex excelentísimo. En ella se cuenta alguna de las mil hazañas sorianas contra quién osara meterse con él.